La obra es una hibridación entre la pintura y la fotografía que muestra las zonas invisibilizadas por culpa  de las zonas turísticas o llamas marca Madrid. Consigo mostrar esta idea mediante la impresión del mapa actual de dicha ciudad, el cual ha sido pintado con tonos que emulan los de los edificios y zonas verdes así como masas negras, conjunto de colores que simbolizan dichas zonas invisibilizadas. La obra está encuadrada en un contexto actual ya que el mapa, así como la importancia de las zonas destacadas, son datos reales y actuales.